jueves, 3 de noviembre de 2011

La agenda de octubre, la agenda del TIPNIS y los contornos líquidos de un debate impostergable.

La octava marcha indígena de la CIDOB, que sostuvo como demanda principal que se detenga el segundo tramo de la carretera, demostró la fuerza de los indígenas de tierras bajas como actores políticos. El conflicto remueve el campo político boliviano, promoviendo importantes cambios tanto en el gobierno, como en la oposición, logrando así el cumplimiento de sus demandas, pero a la vez, reivindica el cumplimiento de inclusión, no solamente nominal, de la agenda de octubre. El proceso pone de manifiesto que los temas de tierra, territorio y el cuidado del medio ambiente, y fundamentalmente el respeto a los derechos humanos y garantías establecidas por la Constitución, son los que guiarán los debates y acciones en lo que queda de gestión gubernamental. El ERI, debatió estos temas considerando las distintas posiciones de los indígenas y del gobierno, a la conclusión del conflicto presenta estos puntos de reflexión.
El  multitudinario recibimiento que dio la población de La Paz, el 19 de octubre de 2011, a la llegada de la marcha indígena responde a un reconocimiento de las demandas de defensa del medio ambiente y los territorios, por un lado, y por otro, una coincidencia en el rechazo a la represión a la que fueron sometidos en Yucumo el 25 de septiembre. Los pueblos indígenas de tierras bajas son el puente o la bisagra del proceso entre oriente y occidente, ya que posibilitan a través de sus memorias colectivas, imaginarios sociales y relatos cosmológicos desmontar, deconstruir y demostrar la falacia de uno de los principales mitos ideológicos en el oriente sobre los que se asienta la hegemonía de la élite cruceña: el regionalismo presentado políticamente como la lucha entre cambas y collas, entre lo andino y lo amazónico, las fronteras materiales y simbólicas trazadas en la media luna y la irresuelta tensión entre Estado y región. El dispositivo ideológico y discursivo del regionalismo permanentemente ha invisibilizado al interior del espacio de lo cruceño otras reivindicaciones, repertorios sociales y procesos emancipativos necesarios de profundizar, por lo que los pueblos indígenas de tierras bajas han desarrollado los “otros” lenguajes políticos posibles y alianzas políticas requeridas para fracturar la dominación hegemónica en el oriente.
Los indígenas de tierras bajas como actores y sujetos políticos,
 Sin la presencia y participación activa de estos pueblos y etnias desde sus miradas cosmológicas y repertorios de acción colectiva presentes en las sucesivas marchas realizadas desde fines de los ochenta del siglo pasado, no hubiera existido proceso de cambio en el oriente, (y sin el oriente, no hubiera habido proceso de cambio ascendente, seguro y estable en las tierras altas) ya que los contenidos, reivindicaciones, procesos de emancipación y alianzas históricas con elementos interculturales llegan a los llanos a través de estos pueblos.
De la mano de los pueblos y etnias de tierras bajas se ha ido sensibilizando a la sociedad (cruceña y nacional) respecto a los significados y urgencias de una agenda del Buen Vivir bajo los lenguajes de la restitución de los territorios ancestrales, los usos y costumbres milenarios que aportan al debate respecto a los equilibrios entre hombre y naturaleza, las tradiciones de lo no tocado por la civilización occidental y la cultura del bosque y la selva amazónica. Las palabras de una joven activista social cruceña, comprometida tanto con el proceso de cambio como con las reivindicaciones de los pueblos de tierras bajas, resumen los sentimientos encontrados de muchos ciudadanos en el contexto del conflicto del TIPNIS: “los indígenas de tierras bajas no sólo cumplen el rol de aliados (respecto al Pacto de Unidad, del MAS y del Gobierno), sino que encarnan el proceso”. Por lo tanto, la octava marcha es un punto de clímax en la historicidad de las sucesivas marchas realizadas desde fines de la década de los ochenta del siglo pasado, llegando a cohesionar a los pueblos indígenas de tal manera que plantean su mirada cosmológica al debate respecto al Buen Vivir, convirtiéndolos en un movimiento indígena compacto, con identidad, proyecto y proyección histórica.
Enemistad dentro del campo político progresista
Entre los años 2010 y 2011 vivimos una situación de traspaso de la lucha entre bloques históricos y políticos en antagonismo (o la lucha inter hegemónica) hacia la lucha entre aliados al interior del mismo bloque indiano originario campesino y popular (o la lucha intra hegemónica).[1] En la lógica de la lucha inter hegemónica entre fuerzas políticas contrarias de derechas y de izquierdas, la polarización política genera adhesión de conciencia, agregación de preferencias y movilización de voluntades entre los miembros del mismo espectro ideológico, pero en la lógica de lucha intra hegemónica entre fuerzas del campo de izquierdas progresistas, la polarización política tiene el efecto de dispersión, de conversión de aliados en adversarios y de adversarios en rivales[2], acercando las posiciones de las disidencias peligrosamente a las fronteras políticas de la oposición.
Si no se contextualizan las luchas, posiciones y discursos tanto del Gobierno como de los pueblos indígenas de tierras bajas se corre el riesgo histórico de enfrentar bajo una mirada reduccionista a actores de un mismo proceso, que de tener discrepancias, disidencias y posiciones encontradas se conviertan - por la interesada actuación política de los medios masivos de comunicación y los soportes digitales de las redes sociales - no solo en rivales sino en enemigos. La obligada pregunta lógica que surge a continuación es ¿a quién conviene esta enemistad producida al interior del campo político progresista?
Una nueva agenda en torno al TIPNIS.
En una entrevista reciente[3], Boaventura de Souza afirma que las contradicciones en el campo político de la izquierda provienen de tres elementos: a) las viejas izquierdas en el sur han sido modeladas por las izquierdas europeas, por lo que reproducen el eurocentrismo monocultural moderno que plantea una limitación epistemológica en la forma de imaginar y gestionar los nuevos espacios, contenidos y lenguajes progresistas, b) las izquierdas se polarizaban fácilmente alrededor de la lucha por el poder (el acceso y control del Estado), tensionadas a través de divisiones ideológicas y c) las izquierdas tenían la misma concepción de desarrollo de fuerzas productivas y de explotación de la naturaleza, basados en el modelo moderno de desarrollismo industrial. Bajo esta lógica, la diferencia fundamental entre izquierdas y derechas radicaría en la titularidad (privada o colectiva) de las fuerzas productivas y medios de producción, sin cuestionar el paradigma desarrollista.
Lo analizado por de Souza manifiesta el trasfondo de un paradigma dominante de las izquierdas en América Latina….el desarrollismo industrialista modernizante que ostenta la propiedad estatal, colectiva y/o mixta de los medios y fuerzas de producción. Por lo tanto, la consolidación de un movimiento indígena de tierras bajas cuestiona esencialmente estos trasfondos de la idea dominante de las izquierdas en el país, en donde el principal debate ha radicado en asumir el control del Estado y la titularidad de los medios y fuerzas de producción pero no ha cuestionado en esencia al paradigma de desarrollo industrialista modernizante.
Evidencia la existencia de varios registros de debates inconclusos en la etapa pos constituyente del proceso de cambio que corren por encima de la división ideológica moderna entre derechas e izquierdas, pues plantea la posibilidad de que existan otros actores, sujetos, identidades, lenguajes, soportes y escenarios posibles a las de las encarnaciones de clase obrera, minera, campesinas y originarias de tierras altas en el horizonte de la izquierda pos capitalista. Por otro lado, reactualiza  - en un contexto de sucesivas crisis mundiales crecientes -  la desconfianza de Marx respecto a las limitaciones reales de cambio bajo la égida del Estado. También introduce contenidos cosmológicos e inter civilizatorios desde tierras bajas al debate pos capitalista sobre el Buen Vivir al cuestionar el paradigma moderno de crecimiento y desarrollo ilimitado basado en la industria depredadora de recursos naturales y matriz energética intensiva en hidrocarburos.
El Vicepresidente García Linera, quien introduce la posibilidad de “tensiones creativas” en el seno del pueblo[4], interpretando la cronología política de las fases por las que atraviesa el proceso de cambio. Tomando e reinterpretando dicha categoría analítica bajo otras miradas posibles, podemos encontrar que bajo el contexto de las contradicciones en el campo de la izquierda desarrolladas con anterioridad, existen “tensiones creativas” entre la agenda de octubre que fue el corolario de las movilizaciones sociales de fines del siglo XX y la emergencia de una agenda de septiembre en torno al TIPNIS, como vórtice de los nuevos debates en el horizonte de la crisis económica mundial de fines del sistema mundo capitalista.
La existencia de una nueva agenda que surge a partir de la VIII marcha vislumbra que el trasfondo a la problemática del TIPNIS tiene varias dimensiones y que no se reduce simplemente a la construcción (o no) de la carretera, ya que visibiliza los sucesivos debates pendientes desde la agenda de octubre. Al hablar de tensiones creativas entre la agenda de octubre y la agenda de la VIII marcha del TIPNIS se interpreta que dichas agendas no están contrapuestas ni constituyen oposiciones entre sí sino todo lo contrario, plantean la continuidad y secuencialidad del proceso que avanza. El debate social en torno a la nueva agenda emergente del TIPNIS posibilita el aporte del país a un urgente debate mundial respecto a la construcción de una alternativa a la crisis del sistema mundo capitalista, que trascienda las limitaciones de las contradicciones de las izquierdas, que retome una dialéctica de la historia pos estatal y que presente una opción al paradigma del desarrollo industrial depredador.
La derecha utiliza las demandas indígenas
La intervención policial a la marcha generó un punto de inflexión en el conflicto ya que posibilitó el descubrimiento y separación entre la emergencia de una agenda social genuina en torno al TIPNIS y otra contra agenda velada que nada tiene que ver con el proceso de cambio, los indígenas de tierras bajas, el TIPNIS y la ecología. Después de la intervención policial a la marcha, dicha contra agenda revela explícitamente sus contenidos e intencionalidades al conducir la atención de la opinión pública desde las reivindicaciones en torno al TIPNIS hacia el pedido de renuncia del Presidente Morales, hecho que sin lugar a dudas obstaculizaría y/o detendría el proceso de cambio, generando un escenario político adecuado para iniciar un contra proceso reaccionario.
El conflicto en torno al TIPNIS – envuelto en un manto de confusión - ha sido el escenario propicio para que las derechas nacionales y cruceñas (asistidas por una derecha internacional) intenten reinventar algún proyecto político con márgenes de legitimidad social. Es fundamental recordar algunos elementos centrales para esclarecer lo anterior: las derechas políticas nacionales y cruceñas se encuentran en una situación de crisis de super estructura al haber sido derrotado su proyecto político de autonomías departamentales como dispositivo de resistencia a un proceso de cambio en curso en el país; sin embargo, su estructura económica, institucional, corporativa, organizativa y sus cuadros siguen estando intactos. En otras palabras, asistimos a un momento (como en otras coyunturas en el pasado histórico) de resignificación de los dispositivos ideológicos y discursivos del bloque político de las derechas al cooptar demandas y reivindicaciones sociales legítimas para justificar la consecución de sus propios intereses que nada tienen que ver con las sensibilidades, luchas y reivindicaciones de la base social. La historia del secuestro de la base popular del proceso autonómico se repite. 
Los intereses de esta contra agenda de las derechas esta intrínsecamente vinculado con la interrupción del proceso pos constituyente, la reforma o eliminación de la actual Constitución y la derrota “social” del actual Gobierno. Dichos objetivos son perseguidos por las derechas nacionales (asistidas por las derechas internacionales) a través de una estrategia similar a la usada en el medio oriente: las rebeliones, revueltas y procesos disruptivos conocidos en la prensa internacional como la “primavera árabe”.  La posibilidad de una “primavera en tierras bajas” sería un recurso político para propiciar y reproducir (bajo el eje de la reivindicación del TIPNIS) diversos alzamientos populares en cadena que provoquen progresivas situaciones de inestabilidad y conflictividad social que desgasten la legitimidad, credibilidad, confianza e imagen del Gobierno.
Sin embargo, ante la magnitud de las consecuencias de una primavera política en el país, no sólo se perdería el debate societal que ha sido posicionado con la emergencia de la agenda del TIPNIS, sino que se perdería con éste la proyección histórica y política del movimiento indígena de tierras bajas.
Sin embargo, la rechifla que recibieron los políticos Germán Antelo y Samuel Doria Medina, por aparecer en la Plaza Murillo junto a la marcha muestra que por lo menos, en la multitud que recibió a los marchistas existe una claridad respecto a la legitimidad de las demandas, y su diferencia con los proyectos políticos de derecha.
Escenarios y contenidos de un debate impostergable.
 El debate societal tendrá que atender dos escenarios temporales que corren paralelos en el contexto de una gran crisis mundial con aristas económicas, energéticas, alimentarias, climáticas y por el acceso al agua: en el corto plazo, (el debate) deberá guiar al Gobierno en la articulación de un plan de contingencia que amortigüe los efectos de la crisis económica – financiera mundial y la fractura del sistema mundo capitalista brindando un “blindaje” a la economía nacional. En este escenario, la variable tiempo es fundamental para afrontar los impactos de un sistema mundial fracturado.
Paralelamente, se tendrá que articular la “tensión creativa” entre las agendas de octubre y la agenda del TIPNIS, gestionando una alternativa civilizatoria al paradigma moderno del desarrollismo industrial extractivo y depredador.  A su vez, trascender la trampa de la economía o capitalismo verde que propone un medio ambientalismo “light” y “fashion” que no aborda de raíz las causas estructurales de la crisis mundial, sino que administra los síntomas de las crisis.
La ecología plantea con vehemente urgencia los contenidos transversales al campo progresista del siglo XXI al cuestionar la relación de explotación – dominación del hombre sobre la naturaleza y al replantear el lugar que ocupa el ser humano en un nuevo equilibrio planetario en donde emergen los derechos de la tierra, los ecosistemas y los entes vivos no humanos. Las nuevas luchas en torno a los abusos, las asimetrías del poder y las aristas de la dominación no giran únicamente alrededor de los humanos – luchas que innegablemente permanecen inconclusas - sino que los siguientes procesos de emancipación deberán incluir a nuestro nuevo prójimo: la Madre Tierra, la naturaleza y sus ecosistemas.
Participaciones en el debate
La marcha es una manifestación de poder, una manifestación de identidad y de capacidad de movilización. Hay que ver la continuidad, secuencialidad de las 8 marchas desde donde los PITB se constituyen en fuerza política.

·         El tema de fondo es desarrollo a ¿corto o mediano plazo? ¿Qué (modelo de desarrollo) queremos los bolivianos? ¿Desarrollo a corto plazo o auténtico desarrollo a mediano y largo plazo? Una plataforma de desarrollo que parta desde el respeto a la madre Tierra. Si optamos por el corto plazo, quemamos el futuro y la posibilidad de desarrollo sostenible. Por eso este conflicto entre los indígenas de tierras bajas y el Gobierno tiene connotaciones políticas muy profundas para ambos actores.
Está en juego el respeto a la Constitución, respecto a la consulta a los pueblos indígenas, el proceso de los contratos con OAS, en un territorio indígena no siguió los pasos legales desde el principio y las demandas fueron desoídas. Por eso, el conflicto se complicó.
La CIDOB busca reconducir el proceso de cambio y reducir las contradicciones al interior del Gobierno. Los intereses de los cocaleros influyeron fuertemente para la construcción y la ampliación de la deforestación del TIPNIS.
A lo largo del proceso surgieron acusaciones que junto con la posterior represión ampliaron la resonancia mediática de la marcha y tuvieron el efecto de hacer crecer políticamente a sus actores.
Los medios de comunicación, en concordancia con los intereses de utilización de la marcha han realizado una campaña mediática que está azuzando la división, medrando políticamente con el conflicto, dándole una cobertura que jamás tenían anteriores marchas indígenas.
El MAS pone relevancia al debate “indígena”, pero de un tipo particular: el de los indígenas (originarios) de tierras altas Existe una instrumentalización del Gobierno respecto a los indígenas de tierras bajas, falta honestidad del Gobierno en su lectura pragmática respecto a la problemática de los indígenas de tierras bajas. Han sido devaluados porque demográficamente, éstos no representan muchos votos. Pero con los resultados de la marcha, se han posicionado como actores políticos importantes.
El conflicto del TIPNIS evidencia una debilidad al interior del Gobierno: el conflicto de poder entre líneas o concepciones de mundo: desarrollistas / industrialistas y “pachamámicos”. (Este conflicto tiene una doble dimensión, es de concepción de mundo y a la vez, es personal.)
El interés del Banco de Desarrollo del Brasil y los acuerdos del IRSA (e intereses estratégicos del Brasil, su sector privado desde el contexto del Brasil como BRICS y la crisis de la economía mundial), arremete contra los indígenas de tierras bajas. Este conflicto evidencia la fractura en el Pacto de Unidad.


[1] Para mayor desarrollo de éste tema ver la investigación La Reconfiguración del Campo Político Cruceño: de la lucha inter hegemónica a la lucha intra hegemónica de Helena Argirakis Jordán. 2011. PNUD.

[2] MAYORGA, FERNANDO: Escenarios Políticos Pos Gasolinazo. Conversatorio de Análisis Político para el PNUD – fBDM. Santa Cruz de la Sierra, abril de 2011
[3] LEÓN, OSVALDO: Entrevista a Boaventura de Sousa Santos: Incertidumbres y procesos contradictorios. Septiembre de 2011. http://alainet.org/rss.phtml

[4] GARCÍA LINERA, ÁLVARO: Las Tensiones Creativas de la Revolución. La Quinta Fase del Proceso de Cambio. Vicepresidencia del Estado Plurinacional. Septiembre de 2011.

jueves, 15 de septiembre de 2011

ELECCIONES JUDICIALES AVANCES Y DUDAS


En medio de campañas de desprestigio y llamados a anular el voto, se analizan los avances del proceso respecto al anterior sistema ya conocido y rechazado de cuoteo de los partidos en el parlamento. Mientras que el público común, no cree en el sistema de justicia, porque la gente común lo ve como un sistema de castigos, muy influenciado por el dinero. Por otro lado, el poder tiende a reproducirse y hay críticas respecto a los procedimientos. Un panorama complicado para las elecciones judiciales de octubre. Hugo Salvatierra, analizó el proceso con un sentido de crítica constructiva.
Los que votamos sí a la Constitución hemos votado por el procedimiento que hay ahora respecto al proceso judicial, porque en la Constitución se contempla la elección de autoridades judiciales. Entre las posiciones a favor y en contra del proceso se presenta el retorno a la polarización.
PROS Y CONTRAS DE ELEGIR MAGISTRADAS Y MAGISTRADOS
″Este proceso va a fortalecer a la democracia, pero con el tiempo″, opina Hugo Salvatierra. “El ciudadano ni siquiera sabe porque está votando ni por quien va a votar. Va a emitir su voto en 45 días en los cuales el Tribunal Electoral va a  hacer campañas de los méritos de los candidatos”. Salvatierra argumenta que el principio establecido en la constitución es el de fortalecer la democracia. Este es un reclamo histórico, lo que importa es que no ocurrió nunca en Bolivia porque los tribunales de justicia siempre fueron cuoteados. Ahora el ciudadano podrá participar con peso específico en la elección de magistradas y magistrados, aunque todavía no hay empoderamiento social de este proceso, argumentó.
La suerte y la desinformación
No ha habido un proceso de largo de consulta. Como resultado, explica el expositor, los que se postularon intentaron suerte para ver si salían elegidos o no y con la inhabilitación de algunos candidatos quedaron felices, con la posibilidad de que también por suerte el pueblo marque en su foto, no hay la posibilidad de una buena información precisa sobre todos los candidatos. No ha habido la suficiente transparencia pública. Incongruencia en las comisiones de trabajos, interés con conocimiento de algunos candidatos que han sido acompañados por algunos avales. Ha habido también posicionamientos del gobierno y la oposición sobre los candidatos, comprometiendo el propósito original de que nadie opine sobre los candidatos. El órgano legislativo debería decidir con independencia, pero es difícil evitar las declaraciones políticas a favor y en contra de los postulantes.
Salvatierra, a la vez resalta y a la vez critica, el valor del origen social respecto a la formación académica, para la selección de los candidatos. Hay una lista de los que históricamente fueron excluidos de poder participar en órganos de poder.  Durante el neoliberalismo, la selección al poder judicial, era por recomendaciones. Mientras que ahora, entre los que están buscando tentar suerte, hay nomás apellidos que nunca tuvieron oportunidad de formarse y hacer más cursos, hay una visión de combatir a las élites para darle más paso a los excluidos.
Por otro lado, se ha valorado lo suficiente la formación académica, no había examen sino era una especie de entrevista, con visiones con respecto al proceso. Había nomás un dejo de prejuicio sobre los que tenían más papeles de formación académica y preferencia a gente que provenía de sectores sociales. La formación ha sido atribuida a élites profesionales y sociales. Se ha dado preferencia a muchos postulantes que tienen relación con los movimientos sociales. Asimismo, el proceso de ponderación ha sido subjetivo, porque las entrevistas no profundizaron en la evaluación de conocimientos y competencias de los candidatos, en el escaso tiempo de 20 minutos que estaba previsto. Entonces primaron elementos muy subjetivos, ni siquiera se puede hablar de recomendaciones, porque muchos que tenían avales fueron eliminados. Con conocimiento del proceso explica Salvatierra, que la selección fue más bien un sorteo.
Los candidatos están prohibidos de expresar sus posiciones, no pueden ni siquiera decir que son candidatos. No tienen espacios informativos y de opinión. Nadie podrá realizar campaña, puede ser que alguien haga campaña para inhabilitar a otros candidatos. Estas disposiciones influyen en incrementar la desinformación respecto al proceso. Los spots informativos que están saliendo son insuficientes para conocer a los candidatos.
Los participantes del Espacio cuestionaron la falta de información y la campaña insuficiente que se  realizando que dificulta conocer a los candidatos y elegir con criterio.
Politización o plebiscito
Se ha politizado el proceso, como no hay prohibición para manifestarse contra, el proceso está politizado, para invalidar o deslegitimar las elecciones. Algunos partidos de oposición están haciendo campaña para  convertir el proceso en una especie de plebiscito, como el Movimiento Sin Miedo y Unidad Nacional.
Salvatierra critica  la validez de las campañas por el voto nulo, estas  tiene el pecado de no surgir de la protesta de la sociedad civil. El “no” proviene de los partidos de oposición. Diversos grupos están  actuando en bloque por posicionamiento político, explicó. Pero por otro lado no surgió  una posición ciudadana, para mejorar los errores del proceso desde dentro.
Sin embargo, a pesar de las críticas internas y externas, el gobierno está actuando con mucha soberbia en la confrontación incluso provocándola.
Tipo de justicia esperado
Todo gobierno busca su reproducción política. El gobierno ni piensa en qué pasaría si hay un órgano independiente. El pueblo no confía en la justicia ni de unos ni de otros. Está en contra de lo existente porque sigue siendo del pasado, pero tampoco confía en este proceso.
La oposición juega su rol porque piensa que va a ser un instrumento de judicialización de la política y además como una oportunidad para ganar apoyo ciudadano y reivindicar como propios todos los votos blancos y nulos.
Salvatierra concluye que todavía no se va a obtener  un órgano judicial independiente. Va a ser un largo proceso de tener un órgano de justicia realmente independiente. Hay que modificar la democracia, porque el concurso ciudadano no solamente es con el voto. Eso se va a dar en la medida en la que la ciudadanía, se encuentre en poder. La campaña informativa no será politizada. Pero, las elecciones sí, con graves consecuencias que incidirán en que se pueda lograr el objetivo de democratizar el poder judicial
¿Qué pasa si los votos nulos son mayores a los de algún candidato?
El voto nulo no va a tener ninguna incidencia. La abstención hubiera sido mejor, porque se contabilizan los votos válidos para contar las mayorías y elegir a los ganadores. Hay naturalmente un 15% de abstención. El voto nulo electoralmente no va a tener ningún valor, pero sí va a ser asumido como propio por la oposición. Es difícil que un candidato sin campañas, sea recordado, a pesar de que el MAS tiene una organización horizontal que le facilita la difusión se propaganda.
Hay una duda respecto a porqué se está numerando a los candidatos en la papeleta y justamente puede ser para garantizar un voto consigna.
CONCLUSIONES
Todo gobierno busca reproducirse en el poder, y para hacerlo tienen que ganar el órgano judicial. En este contexto se dan las elecciones judiciales.
La oposición aprovecha las debilidades del proceso para tratar de convertirlo en un plebiscito de rechazo al conjunto del gobierno actual, en una campaña por el voto nulo.
 Los sistemas judiciales no son ningunas instituciones que resuelven conflictos, sino que transmiten mensajes moralizadores, respecto a lo que está bien o mal y como se hacen las cosas en la sociedad. La Mayoría de los conflictos se solucionan fuera. En este sentido, las elecciones no serán una solución para los problemas de la sociedad, ni del poder judicial.
El ERI expresa su preocupación por la forma como se está desarrollando el proceso.  No solamente está en juego la justicia, sino la aplicación de la nueva constitución. Se va a ir de las manos la posibilidad histórica de construir un sistema distinto, transparente, con control social, más participativo, accesible y con plazos más breves.
En el largo plazo la elección puede llegar a fortalecer la democracia pero con el actual proceso todavía no porque no ha sido transparente, y la elección de candidatos obedeció a factores circunstanciales y subjetivos de la comisión, y no así a méritos académicos.
Persiste la amenaza interna al propio proceso de cambio a través de  candidatos reciclados de los partidos anteriores del neoliberalismo, que ahora son afines al proceso, por puro oportunismo. En realidad hay desinterés de muchos militantes del MAS respecto al proceso de cambio, y del proyecto político. Solo participan como un medio de acceso a cargos públicos, es el caso de muchos militantes de sectores de clase media y profesionales. 
Primero debió construirse al sistema jurídico normativo del país, antes de elegir autoridades
Todos los procesos electorales nuevos han sido cuestionados, pero una vez que se han realizado en Bolivia, se ha visto una buena participación. Es un proceso de aprendizaje de la democracia.

miércoles, 13 de julio de 2011

ERI-SC realizó conversatorio sobre la situación de la Asamblea Legislativa Departamental de Santa Cruz


El jueves 30 de junio de 2011 el Espacio de Reflexión Interdisciplinar de Santa Cruz (ERI-SC) realizó su tercer conversatorio del año en las instalaciones de radio Santa Cruz, en esta ocasión el tema fue “Análisis político sobre la situación actual y perspectivas de la Asamblea Legislativa Departamental (ALD) de Santa Cruz”. El evento comenzó con una exposición de la reconocida politóloga Helena Argirakis, luego de la cual se inició el debate.


Los y las participantes consideraron que la situación actual de la ALD cruceña muestra un resquebrajamiento al interior del oficialismo cruceño, representado por la agrupación ciudadana Verdes y el Frente Amplio (MNR-APB-ADN), producto del estancamiento del proyecto autonómico encabezado por el Comité Cívico Pro-Santa Cruz y la carencia de nuevos liderazgos políticos en nuestro departamento.

Igualmente, algunos consideraron como un avance importante para el movimiento indígena la elección del asambleísta indígena chiquitano Rodolfo López como presidente de la ALD, porque muestra a los pueblos indígenas como actores políticos con proyecto propio, aunque se denotaron diferencias al interior de la denominada bancada indígena, pues el asambleísta indígena guarayo, Wilson Añez, y la asambleísta Yuracaré-mojeña, Rosemary Gutiérrez, no participaron en la sesión de la ALD en la que se eligió a López.

Incluso se mencionó que a raíz de este hecho político –en el futuro- podría gestarse una tercera opción política en el departamento, que tenga como base la plataforma de demandas de los pueblos indígenas y otros sectores sociales excluidos, que pueda capitalizar una gran parte de la población que empieza a desencantarse de accionar político tanto del oficialismo y como de la oposición departamental.

Por otro lado, las impugnaciones a la elección de Rodolfo López como presidente de la ALD, presentadas por los asambleístas del MAS y algunos disidentes de la agrupación Verdes –liderada por el gobernador Rubén Costas- por supuestas violaciones al reglamento de debate de la ALD, ponen en entredicho la legalidad de la nueva directiva elegida.

Finalmente, el ERI-SC reiteró que la situación actual de la ALD refleja un importante momento de inflexión y apertura en el contexto político departamental, que puede permitir el surgimiento de nuevas propuestas políticas que permitan el re-encausamiento del proceso autonómico desde una perspectiva más plural e incluyente.

viernes, 24 de junio de 2011

EDUCACIÓN INDÍGENA: ENTRE LA TRADICIÓN Y LA INTERCULTURALIDAD DISTORSIONADA

La conquista colonial de los pueblos se hizo de muchas maneras: robándoles sus territorios y cambiando su sistema económico introduciendo el dinero, entre otras, pero el último paso para la colonización es la lengua, sin un pueblo no ha perdido su lengua todavía no está colonizado, el pueblo que pierde su lengua ha dejado caer la última muralla que lo defendía.

Bartomeu Meliá

Aprovechando la presencia en Santa Cruz de Bartomeu Meliá, sacerdote jesuita, lingüista y estudioso de las costumbres y la educación tradicional de pueblos indígenas, principalmente guaraníes, de diferentes países de nuestro continente, el Espacio de Reflexión Interdisciplinar Santa Cruz (ERI-SC) junto a Defensa de Niñas y Niños Internacional (DNI-Bolivia) y el Museo de Historia, dependiente la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, organizó dos espacios en los que se analizaron la importancia de la educación tradicional indígena en el modo de ser de cada pueblo. Eventos realizados en las oficinas de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB) y en la sala de teatro del Museo de Historia.

Partiendo de la premisa que en la Constitución Política del Estado se está reconociendo la importancia de las culturas de los pueblos y naciones indígenas en el marco del Estado Plurinacional y que para salvaguardar el modo de ser de cada pueblo es importante la participación de las generaciones de jóvenes, niños y niñas en los procesos sociales al interior de las comunidades nativas, es necesario analizar la importancia de la educación tradicional indígena para la cultura de cada pueblo.

La educación indígena tradicional: instrumento para mantener el modo de ser de los pueblos indígenas

Los pueblos indígenas cuando se autodefinen así mismos en la mayoría de los casos se consideran como un ideal de lo que es ser un ser humano. Así por ejemplo, Ava Guaraní significa persona por excelencia, Weenhayek quiere decir persona diferente, entre otras auto denominaciones.

El hecho de que cada pueblo indígena vea reflejada en su forma de ser a la raza humana, los motiva a mantener sus valores culturales a través del tiempo. Para este fin el mejor instrumento con el que cuentan es su educación tradicional indígena, la cual se ha mantenido por generaciones.

Hablar de la educación indígena es hablar de la cultura de cada pueblo, del ideal de persona en relación al mundo que lo rodea, porque en las sociedades indígenas se educa para que el niño o niña sea un buen integrante de su pueblo. Por esto los objetivos de la educación indígena son tan variados como lo diversos pueblos y sus cosmovisiones propias. Desde la infancia existe una educación diferenciada en cada pueblo indígena, porque la historia y la geografía en la que se desenvuelven son diferentes.

Sin embargo, históricamente desde la perspectiva occidental colonizadora se aseguraba que no existe una educación indígena tradicional, pero en el año 1972 la UNESCO en el informe denominado “aprender a ser” reconoció a la educación indígena como una educación paradigmática, de la que tenemos que aprender las sociedades occidentalizadas.

La educación indígena se relaciona directamente con las múltiples dimensiones de la vida colectiva, es decir tiene la característica de ser una verdadera educación integral, porque relaciona al niño/niña no solamente con su mundo infantil o adolescente, sino con todos los aspectos de la comunidad.

Todo momento en la vida de un joven, niño o niña indígena representa una ocasión para instruirse, desde las enseñanzas del padre cazador, los relatos de los ancianos y ancianas, los sortilegios de los hechiceros, observar las estaciones del año para la siembra, mitos, juegos, música, entre otras, son formas de educación que han prevalecido hasta nuestros días. El niño y la niña indígena participan prácticamente en todas las actividades de su sociedad. El trabajo en comunidad y la reciprocidad es parte del modo de ser de los pueblos indígenas y es algo que van aprendiendo desde pequeños.

Incluso, en el caso del pueblo guaraní existen elemento educativos desde antes de la concepción o el nacimiento del hijo/hija; en esa cultura el hijo o hija nace porque fue soñado, si no ha sido soñado puede nacer con algún tipo de problemas, esta es una forma poética de lidiar con las dificultades que pueden surgir durante la gestación, nacimiento y crecimiento de una criatura.

La educación indígena sigue muy de cerca el ciclo de vida de cada persona, tanto así que el niño o niña desde que está en el regazo de su madre ya está siendo educado en el modo de ser de la gente de su pueblo. A diferencia de la sociedad occidental donde en algunos casos la madre ya no alimenta a su hijo con el pecho o lo hace por poco tiempo. Los pueblos indígenas consideran importante ese contacto físico entre la madre y su hijo o hija.

El instrumento esencial de la educación tradicional indígena es su lengua. La educación por la palabra es el componente más importante que tiene un pueblo indígena para transmitir su historia y cultura. Actualmente probablemente no se trata de mantener todas las tradiciones ancestrales, pero sí las más importantes, las que definen el modo de ser de un pueblo indígena.

Precisamente, se considera que los conocimientos de los pueblos indígenas se mantienen más fácilmente porque se transmiten de manera oral y se transforman en tradición transmitida a través de su propia educación. La educación mediante la palabra implica mayor atención de parte de los educandos, de ahí que los indígenas tienen una gran capacidad de captar rápidamente.

Distorsión de la educación intercultural bilingüe: instrumento de colonización de los pueblos indígenas

Existe una educación indígena propia, practicada por cada pueblo según sus propias características culturales, y otra educación “para el indígena”, llevada adelante por los Estados muchas veces de manera inconsulta. Esta educación es muy peligrosa porque normalmente se transforma es un instrumento de colonización ya que no pretende la afirmación de la identidad del pueblo indígena, lo que se quiere es que el indígena aprenda a leer documentos como la biblia u otros que no tiene que ver con su modo de ser.

La educación formal separa al niño y la niña de la vida en sociedad, mientras que entre los indígenas la educación es en la comunidad, en la cultura no indígena al niño o niña se lo educa para entrar en la sociedad. La educación indígena es aprender a hacer, no aprender a conocer.

Uno de los momentos más importantes de la educación de un niño o niña es la que se opera hasta los 7 años, es ahí donde se forma la persona. Si a esa edad chocan dos visiones distintas de ver la vida surge un conflicto.

Los pueblos indígenas siempre han tenido una educación propia, sin embargo, la colonización ha desconocido estos sistemas educativos propios. Ahora cuando los pueblos indígenas exigen una educación propia le dan educación intercultural bilingüe, que generalmente prioriza al idioma español.

La denominada educación intercultural bilingüe es un error pedagógico porque el niño recibe educación en dos idiomas, pero una de ellas tiene más ventajas. El niño o la niña tienen que percibir que está dentro de un pueblo que habla una lengua propia y por lo tanto debe aprender a leer y escribir primero en su propio idioma, para recién pasar a aprender a leer y escribir en español. Así el niño o la niña en el futuro tendrán menos problemas para leer y escribir en su lengua.

El concepto de interculturalidad en la educación está bien como planteamiento, el problema es que no aplica en la realidad. Interculturalidad significa que la lengua de un pueblo tendrá la misma importancia y se le dará el mismo interés que a la lengua del otro, pero esto no pasa de esta manera, en las comunidades indígenas se ha utilizado a la interculturalidad de manera colonizadora, porque a nombre de interculturalidad se enseña al indígena a leer y escribir en español, pero los que hablan español no aprenden a hablar en lengua indígena.

Intercultural significa que tanto el que habla castellano como el que habla un idioma indígena pueden entrar en un diálogo, pero la educación intercultural bilingüe propicia que el indígena hable castellano mientras que el profesor está años con los indígenas y nunca aprende su idioma.

Incluso los procesos de educación formal llegan a producir diferencias entre los mismos pueblos, como es el caso guaraní, donde dependiendo de quien catequizó a que comunidad, aparecen diferencias de ortografía en la lengua propia.

La semántica de los pueblos indígenas es mal interpretada en muchos casos al ser traducida al español, porque al momento de la traducción influyen en el traductor su origen étnico, religioso o social. Ellos tienen su propia interpretación de sus palabras desde sus experiencias, que tal vez nosotros no podemos comprender y no lo haremos porque no somos indígenas.

Existen prejuicios hacia la educación tradicional indígena y el idioma de los pueblos indígenas, que son asociadas a la pobreza y la falta de progreso (incluso entre los propios indígenas a consecuencia de la colonización), de esta manera se homogeniza la educación de los pueblos indígenas, enseñando a leer y escribir primero en español y luego a traducir a su idioma.

La educación existe cuando la practicamos, si los pueblos indígenas dejan de practicar su formas propias de educación entran en una crisis, si nadie caza deja de haber cazadores, si no hay cazadores deja de haber gente que haga arcos y flechas, y así sucesivamente.

Algunas conclusiones

La educación tradicional indígena es sumamente exitosa, porque sin escuela consiguen formar hombres y mujeres indígenas, que continúan la cultura, incluso a través de todo un oleaje de cosas modernas, atractivos y presiones propias de la cultura occidental.

No se pretende alejar a los pueblos indígenas de los beneficios que le puede dar la modernidad, sino de mantener su modo de ser como pueblo.

Los pueblos indígenas deben ser los responsables de la elaboración de la malla curricular para sus sistemas educativos en sus comunidades.

La autonomía indígena permitirá a los pueblos preservar su cultura a través de la planificación de la educación en su idioma dentro de sus territorios, de acuerdo a sus usos y costumbres.

Se debe replantear la educación intercultural bilingüe de manera que exista la reciprocidad propia de la interculturalidad.

La educación formal tal como es practicada actualmente solo refuerza la colonización de los pueblos indígenas.

La interculturalidad debe ser introducida en las ciudades para que los habitantes de las urbes puedan empaparse de la cultura de los pueblos indígenas.

DESARROLLO RURAL: TRES VISIONES EN UN MISMO TERRITORIO


En ocasión del 40 Aniversario de CIPCA, se realizó en Santa Cruz de la Sierra el Seminario Internacional de Modelos de Desarrollo, Desarrollo Rural y Economía Campesina Indígena. Varios participantes del evento, tanto representantes de sectores indígenas y empresariales, así como invitados internacionales, estuvieron presentes  en un debate organizado por el Espacio de Reflexión Interdisciplinar (ERI-SC) con la finalidad de profundizar el análisis sobre las visiones de desarrollo rural que conviven en Santa Cruz y la necesidad de construir un modelo que asegure la alimentación de las familias bolivianas cuidando el medio ambiente.
Los actores participantes en el debate se identificaron con uno de los siguientes modelos, que coexisten y se superponen:
1. MODELO DE LOS TERRITORIOS INDÍGENAS DE TIERRAS BAJAS
Representantes de pueblos indígenas, explicaron su concepto tradicional de “vivir bien” a través del aprovechamiento sostenible de recursos naturales, sin adoptar modelos de consumo de bienes innecesarios.
“El territorio es muy importante para los pueblos indígenas. El territorio es como un supermercado compuesto por aire puro, convivimos con la naturaleza, en tiempos de los abuelos éramos respetuosos con la naturaleza. No sólo son creencias, cada elemento de la naturaleza. Todo tiene vida y es parte de nosotros. Nuestros abuelos, decían que iba a acontecer lo que hemos llegado ahora. Antes no había necesidad de que se cultive en cantidad, ni arar, ni desmontar. Íbamos al bosque a recolectar porque había de todo. Cada elemento tiene vida. No era necesario cultivar en cantidad. Cada árbol cumple una función importante, cortar a un árbol es como matar a una persona” (Antonia Irayigra, Asambleísta Departamental por Guarayos).
“Se está luchando para tener una vida mejor, pero hay que hacer una diferencia con lo que era el buen vivir: Para los pueblos indígenas era tener para la comida, no nos faltaba nada. No era tener de más(Lourdes Yopié, San Ignacio de Velasco).
Este sistema productivo basado en caza, pesca y recolección fue desapareciendo desde la colonización española, pero con más intensidad desde la década de los 80 del siglo pasado, con la incursión de empresas madereras. Los pueblos indígenas ya no encontraron animales que cazar y se introdujeron sistemas mecanizados que empobrecieron los suelos. Los habitantes, los niños, ya no tienen una alimentación diversificada con productos autóctonos. El resultado fue el abandono de la tierra y la migración a las ciudades. La deforestación influye directamente en el clima, cambian las diferencias entre estaciones y desaparece la biodiversidad.
Los participantes del conversatorio coincidieron en que este sector es el más desprotegido y que necesita mayor apoyo. La necesidad de recuperar la sabiduría de “convivir con la naturaleza y no vivir de ella”, es ineludible para lograr un desarrollo rural sustentable, que beneficie al conjunto de sus actores.  Como explica la asambleísta Irayigra: “Los pequeños productores son los que están afectados por el cambio climático, ya no hay las cuatro estaciones del año. De pronto llega la sequía, llega la lluvia fuerte y se ha dado un cambio. Esta es una preocupación muy grande. Estamos en peligro de hacer desaparecer a la madre tierra. En la provincia Guarayos el 50% de los niños están desnutridos, la alimentación nutritiva que teníamos ya no existe, el zapallo, camote, frejol, el maní.”
2. PEQUEÑOS PRODUCTORES CAMPESINOS INSERTOS EN LA CADENA EMPRESARIAL
Los migrantes de occidente del país se ubicaron desde mediados del siglo XX en Yapacaní, San Julián y otras zonas del departamento de Santa Cruz en las que se dedican a producción agropecuaria, sin embargo, aunque en su mayoría los campesinos mantienen  una parcela con varios cultivos y animales domésticos, al mismo tiempo deforestan porque no tienen capacitación para hacer un manejo sustentable  de los bosques. Aparentemente, los campesinos migrantes han perdido su identidad original, por eso son muy susceptibles a adherirse a la cadena productiva empresarial, aunque como los eslabones más débiles.
Así lo confirma Demetrio Pérez, representante de ANAPO:
La mentalidad de los productores es empresarial, sin embargo, 80% son pequeños productores, el 20% son grandes empresas. Tienen varios problemas de fondo, como la inseguridad jurídica respecto a la tierra. Está causando un desequilibrio en la planificación del productor, este es el cimiento de un edificio al ser construido, si no está sólido el sector se puede caer. En una cadena productiva, si un eslabón se rompe se complica. Cuando el empresario no logra vender en el mercado externo o no le pagan en el momento oportuno, el productor necesita los recursos para cumplir sus compromisos con las instituciones financieras. Cuando el empresario no gana tampoco va a invertir. Por ejemplo en la siembra del girasol, lo propio sucede con el maíz, cuando se cerró la frontera, muchos productores han perdido plata”
Otra característica de la mayoría de los pequeños productores campesinos emigrantes que son parte de la cadena productiva empresarial es su dependencia de los empresarios aceiteros, por ejemplo. Algunos participantes calificaron estas cadenas productivas como opresivas hacia los pequeños productores. “La agricultura está encadenada a las empresas aceiteras. Se llega a un endeudamiento constante. Desde el momento en que uno siembra el grano ya está vendido, lo mismo con EMAPA”. (Roberto Churata Moreno, técnico del municipio de San Julián)
El mercado internacional influye en esta producción, fomentando cultivos cotizados en los mercados internacionales, para a su vez, entrar en la cadena de consumo. Así, algunos hijos de migrantes, ya con estudios instalan sus negocios de venta de agroquímicos.
“El desarrollo humano está basado en la capacidad de compra. Muchas de ellas son creadas artificialmente por el sistema. De pronto nace en la gente la necesidad de tener dinero para contar con esto.  Hoy son víctimas de un sistema que los conduce a ganar dinero. Por ejemplo la demanda de soya, es de las grandes transnacionales que hacen que trabajemos para ellos. En Tarija, los pequeños productores de hortalizas, ahora producen uva para satisfacer las demandas de los productores de vino. Nosotros con un millón de hectáreas de soya, no somos los que consumimos la soya. Entonces, los campesinos se convierten en productores al servicio de las empresas e incluso del Estado a través de EMAPA”. (Teófilo Salgado Docente de Ingeniería agronómica UAGRM)
En este sentido se aclaró que la mayoría de los pequeños productores campesinos emigrantes no tienen mucha posibilidad de elegir, porque en el caso de la soya siembran lo que les sale más “barato”, utilizando semillas transgénicas que tienen mercado. Demetrio Pérez, afirmó que alrededor del 90% de la soya producida en Bolivia es transgénica. Lo mismo ocurre con el uso de fertilizantes químicos. Quienes quieren optar por la producción “sana”, se enfrentan con problemas de menor rendimiento. A la vez, este hecho genera la pérdida de la biodiversidad y de las variedades de semillas nativas en diferentes productos que se van perdiendo. Por ejemplo, en el maíz, actualmente predomina la semilla de maíz híbrido y van desapareciendo las otras variedades nativas.
3. MODELO DE AGRONEGOCIO EMPRESARIAL
Está ligado a la producción de “comodities” agrícolas o materias primas que puedan ser exportadas y vendidas en mercados internacionales. Demetrio Pérez distingue entre los “productores” y los “empresarios”. Los grandes empresarios son justamente quienes tienen los vínculos de exportación tanto de materias primas, como de productos elaborados y acopian producción para exportarla o como insumo de sus productos. Ejemplo, la soya y derivados o el aceite refinado.
A los pequeños productores emigrantes, ideológicamente, se los presenta como similares a los empresarios en sus intereses, cuando la mayoría del lucro lo retienen los empresarios agroindustriales.
Este sector ha obtenido ganancias extraordinarias los años de alza de precios de algunos productos como maíz, soya y azúcar. Sin embargo, los reclamos son permanentes respecto a las exigencias de la Constitución Política del Estado en lo referido al cuidado al medio ambiente, la necesidad de demostrar la Función Económica-Social (FES) de la tierra, según Juan Armando Antelo, ex presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO). Los grandes productores y empresarios demandan constantemente seguridad jurídica de las tierras y que el Estado intervenga con investigaciones para mejorar la productividad y ampliar la frontera agrícola.
El fuerte de este sector, es que los empresarios, no solamente nacionales, sino también brasileños, argentinos y otros, poseen el capital necesario para reinvertir y producir en gran escala, tienen acceso a la tecnología y a semillas mejoradas (trasgénicas) y a fertilizantes químicos. Además de tener un precio subvencionado del diesel como combustible.  En el departamento de Santa Cruz se encuentran 15,29 millones de has. De suelos con aptitud agrícola, de un total de 30,36 que existen en Bolivia. Entonces existe un potencial productivo importante.[1]
En síntesis, mientras el modelo de manejo integral de bosques está muy afectado en las últimas décadas por la deforestación, las generaciones actuales, tanto de la economía tradicional indígena de tierras bajas, como de la economía campesina, se encuentran a la vez amenazadas y “encadenadas”, con las redes de producción empresariales. Los grandes beneficiarios son los empresarios agrícolas que extraen excedentes de los otros sistemas, mientras que se orienta la producción a la búsqueda de lucro en cultivos exportables que producen mayor productividad. Mientras tanto, el medio ambiente y la biodiversidad se ven afectados.
Existen dos modelos productivos tradicionales, el de territorio sostenible con caza, pesca, recolección y pocos cultivos y el campesino migrante con parcelas unifamiliares, ambos están en proceso de transición poniéndose al servicio de los empresarios agrícolas que direccionan la producción de los pequeños productores campesinos indígenas de acuerdo a los mercados internacionales y los “encadenan” comprando la producción anticipadamente.
PROPUESTAS DE ACCIÓN
·        Hay una coincidencia en que a pesar de la existencia de diferentes modelos productivos, representados por grandes empresarios por un lado y productores indígenas campesinos por otro lado, debería buscarse un modelo intermedio que permita asegurar la alimentación de las bolivianas y bolivianos, pero sin dañar el medio ambiente.
·        El Estado debe canalizar ayuda sobre todo al sector productivo indígena y campesino por ser el más vulnerable, para darles las condiciones de producción que les permita producir para la alimentación familiar y generar excedentes para el mercado.
·        Se debe dar prioridad a producir para abastecer el mercado interno garantizando la seguridad alimentaria, apoyando tanto a pequeños como a grades productores.
·        Debe notarse la presencia del Estado en distintos niveles invirtiendo en caminos para sacar la producción, es necesario que la inversión pública vaya con educación y salud al área rural, para disminuir las migraciones.
·        Los gobiernos deben realizar investigaciones para producir mejor, tanto en cantidad como en calidad, sin afectar al medio ambiente.
·        Se necesita asistencia técnica y créditos para producir de manera sustentable.
·        Los pueblos indígenas proponen crear un modelo propio y critican al sistema empresarial capitalista que está ocasionando la crisis alimentaria y ambiental.
·        Respecto al uso de transgénicos hay opiniones divididas, por un lado los empresarios afirman que abaratan los costos de producción permitiendo mayor productividad, por otro lado los indígenas sostienen que afectan a la biodiversidad y crean dependencia con las transnacionales productoras de semillas.
·        Los pequeños productores indígenas critican el rol de EMAPA, indicando que es similar al de los empresarios, porque condiciona los créditos a la entrega de la producción y endeuda a los productores, tal vez debería mejorar su apoyo a la producción con valor agregado.
·        Se constata que el modelo agroexportador solamente favorece a unas cuantas familias, no favorece a los pequeños productores. Es necesario reflexionar y cambiar el modelo económico porque estamos en peligro de hacer desaparecer a la madre tierra.


[1] Tomado de CABALLERO, Teófilo. cuadro Clasificación de Suelos por su aptitud de uso. Supeintendencia Agraria. En Crisis alimentaria una oportunidad para Santa Cruz. Revista Enfoque Económico No 19. Santa Cruz 2011.

lunes, 23 de mayo de 2011

Invitación a participar en conversatorio del Espacio de Reflexión Interdisciplinar Santa Cruz

Estimados amigos y amigas:

Como es de conocimiento público, a raíz de los procesos judiciales relacionados con los curul indígena yucararé-mojeño, se tensionaron las relaciones entre oficialistas y opositores en Santa Cruz.

Con la posesión de  Rosmeri Gutiérrez y  Roberto Carlos Cortez como representantes del pueblo indígena yuracaré-mojeño, la correlación de fuerzas cambia en la Asamblea Legislativa Departamental (ALD). Antes la alianza Verdes y FA, sin depender de la bancada indígena y del MAS, podían iniciar sesiones y aprobar leyes y resoluciones porque tenían mayoría en la ALD (14 votos de un total de 27 miembros), ahora no podrán porque necesariamente tendrán que concertar con la bancada indígena o con la bancada del MAS, inclusive para iniciar las sesiones de la ALD, debido a que sólo tendrán 14 votos de un total de 28 miembros.
Para analizar este tema nos permitimos invitarlo al conversatorio del ERI-SC, a realizarse este jueves 26 de mayo de 2011 de horas 19:00 a 21:30, en el salón de radio Santa Cruz, ubicada en la calle Mario Flores esquina Guendá Nº 20, con base a algunas preguntas motivadoras: 
·        ¿Cómo queda la correlación de fuerzas en la ALD?
·        ¿Qué consecuencias políticas tiene el reconocimiento del quinto curul a la bancada indígena?
·        ¿Existen mayores oportunidades para la incidencia en la ALD, en temas importantes como la adecuación del Estatuto Cruceño, elección de ternas de vocales electorales?

Los y las esperamos.
Atte: ERI-SC